Estos días, la sombra de la corrupción está tomando cada vez más relevancia en nuestro día a día (por poner un ejemplo, en nuestra comunidad se ha abierto una investigación al presidente de la escalera por corrupción; hay quien dice que la señora que hace la limpieza echa más "Don Limpio" cuando hace su rellano)

Pero ayer jueves, el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps (alias "el bien vestio", porque lo de peinarse...) tuvo a bien aclararnos a los mortales la verdadera realidad sobre "el caso Gürtel", para poder sacarnos así de este sinvivir en el que estamos sumidos todos los españoles (todos menos la Esteban, que seguramente ahora mismo estará haciendo empanadillas)

Camps se mostró convencido de que el 'caso Gürtel' es un tema que "apasiona" a la oposición, aunque aseguró no seguir "muy de cerca esta cuestión" porque le parecen "más interesantes otro tipo de cosas".

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Camps ha dicho en la tarima parlamentaria que no sigue muy «de cerca» los vaivenes mediáticos del caso, pero que, «en realidad, los implicados en la Gürtel son amigos de la Moncloa».

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Lo que más me sorprende es que Camps insiste en que "no sigue de cerca" el caso ¿es que a este hombre nunca le han hablado de barrio sésamo? ¿qué clase de compañeros, amigos y familia tiene? ¿cómo es posible que nadie le haya explicado que "el banquillo de los acusados" es "cerca"?

Pero también ha hablado de la tremenda injusticia que se ha cometido con Ricardo Costa (otra vez no se entera: ¡que alguien le diga que lo echó él!) de quien ha dicho que efectivamente actuó bajo las directrices de su partido, con legalidad, responsabilidad, eficiencia y seriedad (y el tío lo suelta como si nada... ¡este hombre es digno de estudio!)

Vamos, que por lo que dice Camps, seguramente al pobre Costa le costó muchísimo aceptar tantos regalos... horas y horas ¿qué digo? semanas debieron de estar para convencerle de que aceptar un reloj de 20.000€ o un coche de lujo son sacrificios que uno debe realizar por su pueblo (eso sí: con responsabilidad, eficiencia y mucha seriedad)

Y es que un político que se precie tiene que ser completo, tiene que estar a todas, como el señor Francisco Camps ¿que Buenafuente tiene un mal día y no te hace reir? coges el periódico y ahí está Paquito para alegrarte el día...